Como pedir una cita sin morir en el intento (métodos de coqueteo no incluídos)
Tsukasa se centra en el chico tan pronto como cruza la puerta de la cafetería. Tsukasa piensa en ese momento que probablemente sea el ser humano más hermoso que haya visto. Su corazón definitivamente no salta de su pecho cada que entra para hacer su pedido habitual, cualquiera que diga lo contrario está equivocado.