Nos pertenecemos (Finalizado)
Él estaba lejos de mi alcance, tan lejos que daba lástima, yo era la que daba lástima. Era ridículo solo el hecho de pensar en que yo podría llegar a gustarle; era una niña, una ilusa niña. Sin embargo, también era una mujer, una mujer frágil, muy delicada, más no una débil, y a la vez ambiciosa de la vida. Era una mu...