A Las Ordenes Del Bandolero
Sin tatuajes, sin piercings ni nada que de indicios de que es un chico malo. Solo un arma y una actitud interesante que hará que una bibliotecaria corte su larga falda y cambie sus camisas olgadas por vestidos del infarto Ella acatará sus ordenes, él no dejará que nadie más se le acerque. Pues después de todo, ella te...