Las criaturas de la noche muerden para matar, o para condenar. *** Intentando escapar de un pasado que desearía poder cambiar, y arrastrando consigo el recuerdo de su hermana muerta, un amor no correspondido, y el deseo de venganza por el vampiro que la condenó al infierno, una joven cazadora lucha arduamente por hallar su camino hacia la liberación. Cuando un joven ladrón se topa en su camino y le hace una propuesta; unir fuerzas para adentrarse en una mortal cacería de criaturas de la noche, ella no perderá la oportunidad de utilizarlo para encontrar su venganza. Y lo que una vez le pareció un cambio en su fortuna no tardará en convertirse en una lucha por la sobrevivencia. Ambos deberán confiar en el otro para mantenerse con vida, pero no tardarán en descubrir que un terrible mal se cierne sobre ellos. El pasado no está muerto, verdades saldrán a la luz, y solo el sacrificio podría ser la clave para conseguir el perdón. Historia ganadora de los premios Wattys 2021 en la categoría Paranormal. ADVERTENCIA: Esta historia puede contener lenguaje obsceno y escenas explícitas. *** Obra protegida por derechos de autor. Queda rigurosamente prohibida, sin la autorización de la autora, la reproducción parcial o total de esta obra por cualquier medio o procedimiento. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS A K. M. MARQUEZ, 2021. POR FAVOR, NO INTENTES COPIARLA NI DISTRIBUIRLA SIN MI CONSENTIMIENTO.

Ella es aquella perfecta combinación entre el cielo y el infierno,fue inevitable para el no enamorarse de aquella tierna diabla..

❝Padre, perdóname, porque he pecado.❞ ✧Actualizaciones lentas. ✧Historia 100% mía. ✧mintaeung.

¿En serio Lena? ¿Un trato con el diablo? Como si el mismísimo diablo existiera, como si dejara de ser un mito para poder hacer ese trato. Fue lo último que me dijo Aitana para así después de que se fuera de casa desapareciera al día siguiente, sin dejar rastro alguno ni siquiera una estúpida pista para descifrar a donde se había ido. No sé cuánto tiempo he estado sintiendo que me observan desde las afueras de mi casa. Mis manos solo sudan y sudan cuando tengo esa sensación. Miro todas las noches cada rincón de mi casa antes de irme a dormir, siempre que reviso nunca encuentro nada, pero siempre que estoy a punto de dormir siento esa mirada. Aitana no contesta las llamadas ni mensajes desde el día que se fue y para ser sincera no entiendo el porqué se fue, sin decir nada. Una cosa que siempre le dije fue que nunca hay que dudar de la existencia de un ser.