ali_gfaundez
Aberdeen. Niebla. Un cuerpo tallado con precisión quirúrgica yace a orillas del río Dee. En su pecho, un zorro esculpido con tal delicadeza que parece respirar.
Durante siete años, el asesino conocido como El Escultor se desvaneció sin dejar rastro. Sus víctimas -cuerpos transformados en arte mórbido- fueron archivadas como piezas de un caso sin solución. Pero ahora, ha vuelto.
La detective Aisling Brennan, marcada por una tragedia personal relacionada con el Escultor, es arrastrada de regreso al campo de batalla. El pasado la persigue. El presente la exige. Y el arte... comienza a hablar de nuevo.
En paralelo, la periodista Tara Byrne lleva años siguiendo las huellas invisibles del asesino, obsesionada con revelar lo que nadie quiere ver. La línea entre la investigación y la obsesión se difumina cuando su propia vida comienza a parecer una obra inacabada del mismo artista.
En una ciudad donde la niebla no solo cubre el paisaje, sino también la memoria, dos mujeres se enfrentan a una serie de asesinatos que desafían toda lógica. Pero esta vez, la firma no está solo en el cuerpo. Está en la historia.
Porque el Escultor nunca desapareció. Solo dejó de exponer.