Segunda novela de la serie «La Corona». "Mi nombre es Piper Adelaine Elisabet Thorhild de la Casa Lauridsen-Fürhenborg-Naess y he venido a ocupar el lugar que me corresponde."

"Jefe, quiero un hijo suyo" Sí, sé que no es lo mejor para decir cuando conoces a tu jefe por primera vez, pero ¿Qué culpa tengo yo de que él tenga unos genes tan buenos? Si él no fuese tan imponente, sexy y atractivo mi fiebre no me habría hecho actuar así, pero no, tiene que ser el hombre más impresionante que he visto en la vida. Y claro, va mi fiebre y se alía con mi libido gritándome a medio pulmón que me estoy haciendo vieja, que ahora que acabo de cortar con mi prometido, por haberme puesto los cuernos en mi propia cama, me llenaré de arrugas y viviré sola con 40 gatos y dos periquitos con complejo de Romeo y Julieta: Se muere uno, se mata el otro. Y eso no puede pasar. No, No. Me niego. Mi sueño siempre ha sido ser madre joven, mi primer hijo tiene que nacer antes de que yo cumpla 27, es decir, que tiene que ser fecundado en 3 meses. ¡Imposible! Me grita la Grecia inteligente. ¡Genes increíbles a estribor! Contesta la Grecia febril. Y decidme ¿Qué otra cosa podía hacer yo al ver esos genes hechos para mis hijos a menos de 3 metros? ¿No me odiarían mis hijos si no tienen consigo esos genes para ellos y se enteran de que fue por culpa mía, porque no me atreví a luchar por los genes que se merecían? ¿Qué pasa si mi hija tiene una nariz enorme o tiene facilidad para engordar al comer helado por mi culpa? No podía ser, asique cuando me habló y mi yo febril tomó el control, solo pude ser sincera. Jefe, quiero un hijo suyo. Vaya sorpresa me llevé cuando, en vez de mirarme por encima del hombro, ignorarme y congelarme con la su fría mirada como supuestamente el CEO "No estás a mi altura, así que ni te hablo, ni te miro" haría, aceptó. Aunque no me desmayé hasta que, sonriéndome de manera arrogante, dijo que una de las condiciones sería engendrar a nuestro hijo por el medio tradicional: Teniendo sexo. ¿Quien dijo que yo era gafe? El futuro lo dirá, nena

Camille ha sido abandonada con una pequeña recién nacida, y su única salvación es el mejor amigo de su ex novio. Ethan está bastante cómodo con su estilo de vida despreocupado e independiente, hasta que ellas tocan la puerta y alteran su orden por completo. Los biberones y pañales sucios nunca lucieron más amenazantes.

"Eres tan frágil, tan pequeño aún. Todavía no conoces los males de este mundo, y espero que nunca lo hagas. La vida nos arrebató a quienes más amábamos y hoy nos tenemos el uno al otro. Intentaron separarnos por el simple hecho de no tener una vida formada, sin embargo, no permitiría que crecieras sin mí a tu lado. No dejaría que te arrebataran de mi lado. Ellos nos dejaron sin ninguna explicación, sin previo aviso, la vida se los llevo, y hoy te prometo luchar por nuestra felicidad, porque cada día crezcas con una familia. Hoy te prometo hermano mío, luchar para que nunca te falte nada. Sé que será difícil, pero no dejaré que nadie te aleje de mi vida, eres lo único que me queda. Hoy te prometo hacer todo por ti, hermano." © 2017 todos los derechos reservados. COPYRIGHT. Historia registrada en Safe Creative y en la Dirección Nacional de Derecho de Autor. Cualquier tipo de copia y/o adaptación será sancionada. #27 en Ficción General - 11/01/18 #21 en Ficción General - 13/01/18 #17 en Ficción General - 19/01/18 #12 en Ficción General - 23/01/18 #8 en Ficción General - 01/02/18 Fecha del inicio: 11 de diciembre del 2017 Fecha del final: 31 de enero del 2018 Portada hecha por: @-stigmas / @Casadelantidoto