Una de mil Cartas
Había tanto que explicar, para le tiempo que habíamos pasado. Aunque lo irónico sea que siempre estuve contigo desde la lejanía de nuestros presencias corporales.
Había tanto que explicar, para le tiempo que habíamos pasado. Aunque lo irónico sea que siempre estuve contigo desde la lejanía de nuestros presencias corporales.