Maldición de la diversión
Diversión y llanto, ambos juntos, una reía y el otro callaba. Una opera que ambos interpretaban ante un público inexistente, una vida que no se vivía y una vida que quería ser vivida. ¿Finalizar todo por una oportunidad? Un contrato y una promesa, una maldición como una bendición, dando paso a aquella risa unísona que...