¿Del odio al amor? ¡Hay un estúpido cupido! Olivia Sinclair tiene una vida tranquila, sin muchas pretensiones más que ayudar a su familia económicamente. El único problema con el cuál debe lidiar es su jefe: dueño de un humor irascible. Un imprevisto viaje lo obliga a dejar su empresa en las manos de su único hijo, Maximilian. La vida apacible y feliz de Olivia da un vuelco. Se ve inmersa en los cambios de la inmobiliaria, y también, en los giros de su vida, ya que, aunque no tienen intención en trabajar juntos, Olivia cae rendida en los encantos del hijo de su cascarrabias jefe. Solo un pequeño detalle se interpone entre los dos, y es que Maximilian está a punto de casarse con una víbora. ¿Qué creen que sucederá entre Livy y Max? ¡Descúbrelo, Con Ella!

Dawn se entera de que está embarazada al mismo tiempo que descubre que su compañero y pareja le es infiel. Luego de eso, decide escapar para convertirse en madre soltera. *** ¿Les ha pasado que hay días en los que sienten que nada sale como lo necesitan? Bueno, en mi caso no fue un día, fue una racha. Quedé embarazada, mi pareja me fue infiel y me despidieron; una mala noticia tras otra. ¿Cómo podía hacer ahora para afrontar un embarazo y un corazón roto a la vez? Dicen que los cambios empiezan desde adentro, que las cosas no hay que forzarlas, sino dejarlas ser, pero... ¿podré lograrlo?

Ángela es una chica simple, despistada, torpe y cotilla. Demasiado cotilla. Decide mudarse y empezar el nuevo curso en una nueva... universidad. Típico, ¿no? Pero mudarse allí hace que su vida dé un giro inesperado. ¿El por qué de esto? Bueno, la relación que tiene con sus padres estaba un poco fría y el ambiente de su ciudad era desesperante. Que su amiga le dejase de hablar y el hecho de que su novio no había tenido reparos para besarse con una chica delante de ella había sido el gran detonante de todo. ¿Cómo llegaría a saber que compartir piso con su nueva compañera iba a hacer que conociese a Adrián? Vivir allí le iba a suponer una aventura porque las risas seguro que no faltaban... Ni las fiestas... Ni las miraditas seductoras... ¿No pasaba nada por vivir un poco la vida junto a sus amigos y pensar en Adrián de formas no aptas para menores, verdad?