Mi profesor, mi verdugo y mi primer amor
He de confesar que entrando a la secundaria me destrampe, ver los cuerpos de los maestros vestidos con ropa formal, la marca de sus bultos en el pantalón de vestir me excitaba y me hacía babear. Esto no pasó desapercibido para algunos de mis compañeros y sobre todo para algunos de los mismos maestros que me lo hiciero...