Snowman es el amigo con el que me reúno todos los 22 de diciembre para hablar sobre todo lo que pasé y como esto revolucionó mi ser. Snowman escucha mis penas sin juzgar, él es ese que escucha con atención y cuando él te escucha: Tú te escuchas. Cuando Snowman te escucha no tiene que darte una enseñanza porque al final del día sabrás cuál es. La lección siempre estuvo frente a mí y la noté cuando él me escuchó. Con Snowman aprendí la lección que este año me dejó. PORTADA: @imlysart Prohibida su adaptación o distribución. Iamdra Esmibelin © Todos los derechos reservados.

"A veces encontramos nuestro destino en el camino que tomamos para evitarlo". Alguien me asesinó. Yo morí. Pero esta no es la historia de un final, es una historia de comienzos. O, al menos, es la historia de mi luto, de sentir la perdida y la falta de partes de mi, de cómo un corazón puede seguir latiendo después de romperse, pero nunca con la misma intensidad. Esta no es una historia de mariposas en el estómago, aquí las mariposas cambian el mundo un aleteo a la vez. Mateo D'Angelo. Ese es mi nombre. Es una de las pocas certezas que la gente jamás pudo quitarme. Y esta es mi historia, aunque hayan querido arrebatármela. Está la historia de un adolescente que tuvo que ir en contra del aleteo de una mariposa, esta es la historia de un adolescente que terminó en la plaza de los corazones rotos.

Existen millones de personas en el mundo capaces de destapar lo que llevas oculto, de llevarse lo que abrazas con tanta fuerza, aunque sea agotador aferrarse por tanto tiempo a lo que quiere volar. Especialmente, cuando se trata de ti mismo. Muchos dicen que las almas no se conocen por accidente, pero que nadie es capaz de encontrarnos para salvarnos de lo más profundo de nuestros propios océanos, o de las cenizas que dejó el fuego que alimentamos esperando a convertirse en llama. Pero, ¿qué pasaría si un día te chocas con el océano o con el fuego delante de tú casa para enseñarte a nadar y volver a arder por tú cuenta? Brooke tiene un océano de miedos, pero una llama de resurgir. Aidan tiene un incendio, pero no sabe nadar sin su propio fuego destruir. ¿Qué tan éfimero tiene que ser éste choque de mundos para encontrar lo que estaba perdido?