Hasta que la vida nos separe
-Soy la Muerte, amor, aunque la gente me llama Mors -dice el chico de ojos dorados. ¿La Muerte está delante de mí? Literalmente. «Mors». Su nombre se repite en mi cabeza. -¿Y tú? -pregunta él con curiosidad-. ¿Cuál es tu nombre? Trago saliva antes de dejar salir: -Olive...-empiezo-. Live -me corrijo atropelladamente. ...