Entre nosotros nunca hubo odio
Ambos chicos se quedaron en un cómodo silencio, Golden miró hacia el cielo, era una noche hermosa, y como ese silencio empezaba a inquietarlo, decidió entablar una conversación. -Es una hermosa noche -eso fue lo que susurró con una suave sonrisa, mirando de reojo a su pareja, quién sonrió al escuchar la suave voz de s...