Historias de un adolescente.
Hoy la lluvia caía mojando la misma calle en que soltaste mis manos, para dejarme sola con mis preguntas y mis dudas, con mi soledad, con mis heridas, con mis lágrimas.
Hoy la lluvia caía mojando la misma calle en que soltaste mis manos, para dejarme sola con mis preguntas y mis dudas, con mi soledad, con mis heridas, con mis lágrimas.