Hanna Lorence siempre creyó tener su vida bajo control. Perfecta, ordenada... impenetrable. O al menos, eso era lo que se obligaba a creer. Pero nunca pudo sacarse a Alex Grayson de la cabeza desde el primer día. Esa pelinegra de ojos verdes la desarmó por completo. Y para Hanna, darle poder a alguien siempre fue peligroso. Ahora, los roles cambiaron: es el turno de Hanna de atormentar a Alex. Alex jamás había conocido la traición... hasta confiar en Hanna. Ella, que no creía en nadie, decidió abrirse, y perdió. Porque hubo un tiempo en que lo eran todo la una para la otra. Un antes perfecto. Pero esto era el presente. Y en el presente, las heridas pesan más que los recuerdos. En su presente, Alex no tiene lugar para Hanna Lorence. Solo una de las dos puede salir de esto sin romperse. Y esta vez, Alex no piensa perder.

Una niña de tan solo seis años pasa por un gran accidente automovilístico junto con su familia, donde solo ella sobrevive. Diez años después ella decide escapar de esa casa de tormentas donde vivía y al hacerlo se encuentra una luz de esperanza por la cual vivir.