Transmigrado a un videojuego homoerótico
Suo Fei, un otaku veterano, ha pasado tres días y tres noches seguidas jugando la homoerótica y altamente explícita obra maestra llamada "Yalance". Pero ha valido la pena, ya que pudo conquistar a los nueve pequeños shous de las nueve grandes razas. Sin embargo, cuando se acercaba al final con el anticipado festín de...