Nunu08_111_17
O Boruto aprendía a tener un mínimo de educación, o Konohamaru, su mánager, iba a explotar.
Literalmente.
Lo haría.
No pasaba un solo día sin que Boruto hiciera alguna de las suyas. A Konohamaru se le iba a caer el pelo del estrés.
Pero entonces, un día cualquiera para el, conoce a una chica... que no lo reconoce y piensa que se está inventando que es famoso.
¿Perdón? ¿No sabe que es un cantante famoso? Su cara está hasta en los productos de limpieza (hace nada hizo una colaboración con una marca de esponjas y las tías se volvieron locas.)
Y, para colmo, Boruto se ha colgado de ella. Pero, hay que ser sinceros, le destrozó el ego en menos de cinco minutos.
Pobrecito. Un auténtico masoquista emocional.