Hikaru Sarutobi vuelve a Konoha luego de cinco años en los cuales la habían considerado muerta. Pensó que iba a ser capaz de dejar atrás los fantasma del pasado pero, al volver, se ve forzada a enfrentarlos, en especial a un cierto shinobi. -Pensamos que estabas muerta- se escuchó una voz decir, sonaba dura y distante. Hikaru apartó por primera vez sus ojos de su padre para ver a quien había hablado aunque tenía una leve sospecha. Hatake, por supuesto, siempre arruinando todo. Conocía su voz demasiado bien, tenía un tono especialmente reservado para ella, ese que decía estas-equivocada-y-no-hace-falta-que-te-pelee-para-demostrarlo-porque-soy-muy-cool-y-maduro-con-mi-estúpido-apenas-visible-ojo. -¿Y lloraste mi muerte? -Todos lo hicimos -Kakashi tenía el ceño fruncido. No puede pretender volver después de tantos años sin ningún tipo de explicación-. Tenías gente que se preocupaba por ti, por supuesto que todos lloramos tu muerte. Hikaru soltó una pequeña risa cargada de ironía. -¿Qué es tan gracioso?- la paciencia de Kakashi estaba a punto de llegar a su límite. -Me pareció hilarante que te incluyeras dentro del grupo de personas que se preocupaba por mi, la última vez que me fije, tú fuiste una de las razones por las que me fui.

"𝑀𝑒 𝑐𝑢𝑒𝑠𝑡𝑎 𝑟𝑒𝑠𝑝𝑖𝑟𝑎𝑟 𝑏𝑎𝑗𝑜 𝑙𝑎𝑠 𝑠𝑎́𝑏𝑎𝑛𝑎𝑠 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑖𝑔𝑜. 𝐸𝑠𝑡𝑜𝑦 𝑐𝑎𝑛𝑠𝑎𝑑𝑎 𝑑𝑒 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑒𝑔𝑢𝑖𝑟𝑡𝑒. 𝐷𝑒 𝑠𝑖𝑒𝑚𝑝𝑟𝑒 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑒𝑔𝑢𝑖𝑟𝑡𝑒 𝑁𝑢𝑛𝑐𝑎 𝑐𝑜𝑚𝑝𝑎𝑟𝑡𝑒𝑠 𝑡𝑢𝑠 𝑗𝑢𝑔𝑢𝑒𝑡𝑒𝑠 𝑛𝑖 𝑡𝑒 𝑐𝑜𝑚𝑢𝑛𝑖𝑐𝑎𝑠. 𝑆𝑢𝑝𝑜𝑛𝑔𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑜 𝑠𝑜𝑦 𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑖𝑡𝑎 𝑑𝑒 𝑗𝑢𝑒𝑔𝑜𝑠 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑡𝑖" ••••• -𝑁𝑜 𝑠𝑒 𝑎𝑐𝑒𝑝𝑡𝑎𝑛 𝑎𝑑𝑎𝑝𝑡𝑎𝑐𝑖𝑜𝑛𝑒𝑠 -𝐶𝑜𝑛𝑡𝑒𝑛𝑖𝑑𝑜 +𝟷𝟾 -𝐿𝑜𝑠 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎𝑗𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝐽𝐽𝑘 𝑙𝑒 𝑝𝑒𝑟𝑡𝑒𝑛𝑒𝑐𝑒𝑛 𝑎 𝐺𝑒𝑔𝑒 𝐴𝑘𝑢𝑡𝑎𝑚𝑖.