Sí, mi señor
¡Por favor déjenme ir! - vuelvo a gritar sollozando. No sé hace cuanto estoy acá para está oscuro y huele muy mal, tengo mucho miedo, sólo quiero volver a casa, mi cabeza me duele mucho y tengo hambre. -Por favor, sólo quiero irme a casa- digo a la nada explotando en lágrimas No confíes Nada es lo que parece.