¡Solo un juego mas!
El casino puede ser un lugar frio y sin piedad, pero siempre hay ese calor de la emoción al apostar. O antes lo había cuando El "Patriarca Yiling" llego, un joven de 20 años, un maestro en el poker, desde su llegada nunca había perdido ninguna apuesta y disfrutaba ver a los hombres que le venían a coquetear sufrir. ...