-¿Y qué pensáis hacer?-Les preguntó el rubio mientras buscaba algo para beber en el frigorífico. Calum se encogió de hombros. Mike, que estaba sentado en la misma cama que él, le dio un trago a su bebida y al fin se atrevió a decir algo. -No podemos hacer nada, Luke. La batalla está perdida. Hemos metido demasiado la pata y...es imposible.-Su mirada pertenecía al suelo ahora. -¿Imposible sin ni siquiera haberlo intentado?-Ash parecía no creerse lo que acababa de salir de la boca del chico sentado en la cama de enfrente-¿Sois conscientes de que si no hacéis algo a tiempo, las perderéis para siempre?-Recalcó ese "para siempre". Calum volvió a mirar ese último mensaje. "Eres un gilipollas, Calum. No vuelvas a dirigirme la palabra en tu puta vida." Al menos él había recibido un mensaje, su amigo no. -Chicos, olvidad vuestro puto orgullo de una maldita vez. Esto os está matando a los cuatro por dentro y lo sabéis. No podéis seguir así.-Luke se dio la vuelta con

-Desde que apareciste en mi vida, todo a cambiado. Dime quien eres de verdad, mirame a los ojos y dimelo.