Lando Norris se enamoró de Carlos Sainz cuando todavía no entendía la diferencia entre admiración y amor. Nunca hubo un beso, una promesa, ni una posibilidad real... solo una sonrisa amable que se le quedó pegada al pecho. Luego Carlos se fue a Ferrari, y llegó Daniel Ricciardo con su risa fácil y sus bromas eternas, como un parche sobre una herida mal cerrada. Pero él también se fue. Y entonces, cuando Lando ya no buscaba nada, llegó Óscar Piastri. Con Óscar no hubo fuego inmediato ni palabras dulces. Hubo silencio, mirada atenta, y una paciencia inusual para alguien que también venía roto. Óscar no quiso ser su amigo. No le pidió permiso para enamorarse. Simplemente se quedó. Y así, Lando aprendió por fin la diferencia entre que te quieran... y que te elijan. Una historia sobre el amor que se construye sin prisa, entre curvas, secretos, y una papaya que nunca deja de acelerar.

Cuando Carlos Sainz conoció a Lando Norris, por primera vez, tuvo miedo. Miedo de cruzar una línea. Miedo de herirlo. Miedo de que las cosas cambiaran. Y Lando... Lando, en todo su caos, solo quería quedarse. Había algo relajante en estar con Carlos. Pero cada vez que sentía que Carlos se cerraba, también retrocedía. Así que se quedó en ese punto medio extraño. Ese espacio incómodo donde uno sirve café al otro y le sonríe más de lo necesario. Donde los dedos se rozan en la cocina, pero nadie dice nada. Donde las miradas duran un poco más de lo normal... pero ninguno se atreve a dar el primer paso. Hasta que el invierno los obligó a compartir techo. Y esta vez, no había circuito. No había cámaras. No había excusas. Solo ellos dos.

En el implacable mundo de la Fórmula 1, donde cada milésima de segundo puede definir destinos, tres pilotos luchan no solo por el podio, sino por sus propios sentimientos ocultos. Lando y Oscar, compañeros de equipo y amantes en secreto, deben mantener su relación bajo llave mientras compiten en la cima del automovilismo. La llegada de Franco, un joven talento argentino que reemplaza a un viejo amigo, pone en jaque ese equilibrio. Entre risas, miradas y carreras a toda velocidad, los límites entre amistad, lealtad y deseo se desdibujan. En un deporte donde la velocidad es ley, ¿podrán ellos manejar también los secretos del corazón? Pero cuando creían que todo se acomodaba y sólo crecían las amistades, Pierre entra en escena, haciendo que los momentos de tensión, pero de amor surjan nuevamente.

En el mundo que se desenvolvía alguién tan conocido como el Alfa Norris, había dos caras. La primera, aquella en la que todos lo conocían como el fuerte empresario y gran tiburon para de los negocios dentro y fuera del país en el que estuvieran y la otra... esa faceta suya que mantenía escondida del conocimiento público, siendo líder de una las príncipales mafias de toda europa. Sin importarle en absoluto lo que pudiese pasarle a su vida en alguna de las misiones, o eso pensaba, hasta que aparece él. Un omega castaño de ojos verdes que le pone el mundo de cabeza, quien le hace replantearse que tan fuerte podría ser el lazo de destinados si seguía jugando con su vida.

Debido a un desperfecto doméstico Franco comienza a asistir regularmente a la nueva cafetería que se instaló a unos cuantos pasos de su trabajo, sin sospechar que, las características del café que tanto le deleitaban, no solo las encontraría en su taza. ~☕️~ Él era una persona seria y para muchos: amargo. Pero con el paso del tiempo descubrí en él algo inesperado, que como el café, el dulzor también va de la mano. Su nombre era Charles, el barista, y él era amargo y dulce como el café.

Donde Charles le quiere robar el novio a Lando Podrá el escorpiano mantener alejado a su amigo de su novio? AU TERMINADO

Nunca pensé que salir con alguien cinco años menor me haría revisar mi cara en el espejo buscando arrugas... Pero así es amar a Franco. Un argentino, incansable, encantador y joven. Con 22 años recién cumplidos. Yo solo quería seguirle el ritmo. Quería demostrarle que todavía puedo bailar hasta el amanecer, entrenar como él, vivir como si tuviera 22 otra vez. Spoiler: terminé desmayado en su cumpleaños.

Dos estrellas del fútbol, una Eurocopa y el mismo objetivo ¿que puede salir mal? Un viaje lleno de promesas, adversidades y vivencias que no olvidarán. Pedri y Gavi no sabían lo que significaba amar hasta que un sentimiento brotó en ambos. Dudas y nervios los asaltarán durante el camino, pero los dos tienen algo claro: suceda lo que suceda estarán juntos.

-Te lo digo, Lando, los tiburones no tienen piernas. ¡Eso me da ventaja inmediata en tierra firme! -Claro, pero un tiburón no necesita piernas. Nadando te gana seguro, y si llegas al ciclismo con las piernas cansadas, estás frito -respondía Lando, riendo sin parar. Oscar los observaba desde la esquina, sintiéndose como un extraterrestre en medio de la conversación. -¿De verdad están debatiendo eso? -preguntó, arqueando una ceja. -Es importante. Es una cuestión de estrategias -insistía Franco con seriedad absoluta. -¡Exacto! Estrategia, Oscar. Tú eres el ingeniero, deberías darnos una respuesta lógica -animó Lando, emocionado por la discusión. Oscar suspiró, resignado. -Dependerá de cuánta hambre tenga el tiburón. AU FRANSCAR. Óscar Piastri x Franco Colapinto. Max Verstappen x Sergio perez. y otras parejas aún no definidas. Capítulos cortos. No esperen mucho de este AU, ni yo sé bien de qué va...