Llega un momento en la vida de toda persona donde conoces a alguien y sientes que estas en una nube y que nada ni nade podría destrozar este frenesí. Pero poco a poco Marina se da cuenta de que esto no es así, que la nube en la que esta pronto se deshará en dolorosas lagrimas, pero que a pesar de todo, el sol vuelve a salir y que después de la tormenta viene la calma. O eso espera Marina.

El chico perfecto se me apareció una noche ¿pero realmente todo se quedará en un sueño, o el destino hará que se haga realidad?