XxLadymoon13xX
Todo era paz en el reino de Kandala, hasta que una trágica noche los monarcas fueron asesinados por su cónsul de confianza, dejando a sus dos jovenes hijos a cargo de la monarquía.
Como si eso no fuera suficiente, el reino decayó en una grave enfermedad cuya única cura eran los pétalos de una flor que crecía escasamente en pocos lugares del reino cuyos cónsules no confían en la corona.
Sin embargo el principe tiene un plan arriesgado que podría salvar la paz en Kandala, pero... ¿y si lo descubrieran cometiendo actos de traición?
¿él y sus aliados son lo suficientemente ágiles?
¿La ayuda de un reino externo realmente marcaría una diferencia?
¿Vale la pena arriesgarlo todo por un absurdo sentimiento que crece como un huracán?