Jane solo tiene dos cosas claras, que es hetero y que nunca se volverá a enamorar. O tenía, hasta que una chica, se cruza con ella a través de una app. Rápidamente, lo que comienza con una amistad sincera, empieza a derivar en sentimientos desconocidos para ambas. Jane, no tiene claro qué está pasando, pero no quiere salir herida otra vez. Y mucho menos, se deben enterar sus padres o amigos, si no, no volverá a hablar con ella jamás. ¿Qué puede pasar con padres estrictos y nuevas emociones a más de 10.400 km de distancia? Nota de la autora: Holiis, esta es mi primera historia, porfa, no me juzguen, gracias. Os amo a todos.