El inframundo tiene el trono vacío. El rey no está en el averno. El mal camina en la tierra. Pronto va a arder el cielo. Pronto... empieza el juego. Encerrada cuatro años en un convento, Gianna Morrigan ha cumplido su condena, pero su corazón sigue prisionero de un amor que cree perdido. Su destino, marcado por la mafia, la arranca de su aislamiento para ser entregada a la Bestia: Giovanni Monaca, el temido líder de la mafia italiana. Atrapada en un matrimonio forzado, Gianna se debate entre la posesión y la destrucción en un juego peligroso donde cada movimiento la acerca a una guerra de mafias que desenterrará los demonios de su pasado. En este infierno de peligros y traiciones, los límites entre el amor y la obsesión se desdibujan. Gianna es solo un peón en el tablero, pero las piezas están a punto de moverse.

Damien Volkov, conocido como La Bestia y el Alfa implacable del Clan de la Noche, es un hombre cuyo imperio mafioso se construyó sobre el miedo y un control masivo. Cuando una alianza crucial exige que presente una pareja, su mundo choca con el de Luna Morales, una bondadosa repostera dispuesta a todo para proteger la panadería de su familia de las garras de un clan rival. Damien le ofrece un contrato frío: protección total a cambio de que ella se haga pasar por su mate. Pero el destino tiene un giro cruel, pues el dulce aroma de Luna es la señal que su lobo ha esperado toda su vida, transformando su farsa calculada en un lazo predestinado por la Diosa Luna. Sin embargo, en medio del miedo, una inexplicable y poderosa atracción comienza a nacer entre ellos, un magnetismo que desafía la lógica y el contrato que los une. Ahora, ambos deben navegar un camino sembrado de mentiras, enemigos mortales y un deseo que podría destruir sus mundos, donde el trato que hicieron para sobrevivir podría ser lo único que termine por condenarlos.