El juego de los Dioses
Los dioses están molestos, la razón siempre es la misma: Los humanos. Increíblemente ahora su enojo no se dirigía a éstos, más bien, a los nuevos espíritus de los elementos, pues han difamado y violentado a su compañera inmortal. Y éso es revelarse ante los Dioses. Y el burlarse fue la razón de su ira. No pueden hacer...