Bajo el volcán
¡¿Qué tan jodido puede estar un muchacho enamoradizo para fijarse en una persona que está a 1000 kilómetros de distancia?! Sí, ese soy yo, luchando contra algo mucho más poderoso. Pero, ¡hey!, sé que las risas no faltarán... Al menos eso quiero pensar.