"Si tú mueres, yo también. Somos un solo ser.." Desde pequeño, Nagi Seishiro no sintió nada. Ni tristeza, ni alegría, ni amor. Solo... vacío. A pesar de los esfuerzos de su madre por hacerlo reír, nada logró conmoverlo. Ni los cuentos. Ni los abrazos. Ni los dulces. Solo existía. Respiraba. Dormía. Jugaba. Pero no vivía. Hasta que apareció ella. _______ Saeko, una chica tranquila, amable, dulce, amante de ayudar a otros. Con talento en la cocina, pasión por el arte y una sonrisa tan cálida que parecía derretir el hielo de cualquiera. Cualquiera, menos él. Hasta que supo su nombre. Hasta que vio sus manos. Hasta que descubrió que había sido ella la que aparecía en sus sueños un año anterior de que comenzara todo esto. Antes de que comenzara Blue Lock. Incluso antes de conocer a Reo. Desde ese momento, lo entendió todo. Ella era "la indicada". La que despertó por primera vez un sentimiento real en su pecho. Pero Nagi no entiende de amor sano. No conoce los límites. No está dispuesto a compartirla. Porque si alguien se atreve a tocarla... a mirarla como él la mira... a robarle aunque sea una palabra... No lo permitirá. Y no dejará evidencia. Justo en la forma en que le enseñó su padre. ____________________________________________ 𖤐 Yandere!Nagi Seishiro x Lectora (tú) 𖤐 Inspirado en el juego Yandere Simulator 𖤐 Los personajes (de Blue Lock) e ilustraciones de esta misma no me pertenecen, a excepción de los personajes creados. 𖤐Triángulo amoroso entre Reo, Nagi y la lectora. 𖤐 Ella cocina. Él elimina a las amenazas.

En un lugar donde el ego lo es todo, ella era una excepción. Sensible, amable, dulce... una chica que parecía salida de un cuento. La nueva asistente y vloguerista de Blue Lock: una luz inesperada entre tantos depredadores. Alexis Ness la notó desde el primer día. Su sonrisa. Su voz. Su forma de ver lo mejor en todos... incluso en él. Y él, que desde pequeño soñaba con cuentos de hadas, decidió que ella sería su final feliz. Aunque tenga que romperle las alas para que no vuele lejos.... para que no se pueda liberar de él. "Un príncipe debe proteger a su princesa. Incluso de sí misma."