En Saturno
-Cuando pueda me pone una margarita Y ahí estaba ella. Llegó recostando su cuerpo a la barra y mostrando una sonrisa a medias. No miré al instante porque estaba un poco perdido dentro de mis pensamientos, pero escuchar su voz me sacó del manojo de ideas que navegaban por mi mente. Puedo decir que girar mi vista a ver...