Park Roseanne vive una situación desesperada. La larga enfermedad de su padre ha llevado a su familia al borde de la ruina, con el peligro inminente de perder su hogar y de que los servicios sociales les arrebaten a sus hermanos pequeños, algo que mataría a su desconsolada madre, todavía hundida por el dolor de perder al amor de su vida. Por eso, acepta sin dudar la proposición del joven Jeon Jungkook, un hombre muy atractivo, seductor y rico, del que emana un aura de autoridad que la atrae y repele al mismo tiempo. ¿Conseguirá Roseanne convertirse en su perfecta sumisa durante treinta días y salir indemne, o perderá el corazón en el proceso? "A partir de ahora me perteneces tanto en mente, como alma y corazón. tu cuerpo desde este momento se convierte en mi propiedad hasta finalizar el trato. Deberás obedecerme pero sobre todo serme leal hasta lo más profundo de tus deseos, porque yo soy tu amo y tú eres mi sumisa, Cariño. " ACLARACIONES: -Esta historia es 100% erótica, es decir que contiene escenas sexuales muy detalladas ya que esta obra involucra el tema del mundo de la sumisión, por lo tanto la gran mayoría de los capítulos serán explícitos. Así que si eres una persona muy sensible con estos temas, te recomiendo NO leerlo, ya que toda la historia tiene este tipo de contenido que es dirigido para un público +18, y si lo vas a leer, hazlo bajo tu PROPIA RESPONSABILIDAD. - NO me pertenece la historia, créditos a Sofia West, es la escritora original, yo solo le pondré un pequeño toque personal a la historia en algunos capítulos. -El ship protagonista es el Rosekook, si no te gusta esta pareja ficticia, entonces evita entrar en la historia y no dejes comentarios ofensivos, respeta a las personas que sí tenemos este gusto en común. Sin más que mencionar, espero que disfrutes tu tiempo de lectura. -Mi Dulce Sumisa

El, un chico Rebelde. Ella, una princesita. ¿Que puede salir mal?

𝑬𝒍𝒍𝒂 𝒍𝒐 𝒔𝒊𝒈𝒖𝒆 𝒂𝒎𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒂 𝒑𝒆𝒔𝒂𝒓 𝒅𝒆 𝒔𝒖 𝒕𝒓𝒂𝒊𝒄𝒊ó𝒏 𝒄𝒐𝒏 𝒔𝒖 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒂. -¿Aun me amas?-Hablo el pelinegro mirando a la rubia-. Mírame a los ojos y dime que no me amas La rubia sentía su cuerpo débil que pensaba que se iba a desmayar. -¡S-Si te sigo amando!-Sus lagrimas salían sin parar y sus manos temblaban-. Y por eso me odio...me odio por seguir amándote /No se aceptan copias ni adaptaciones sin permiso del autor/ /Si no te gusta la historia no hagas comentarios ofensivos hacia la historia/ /Créditos a sus respectivos dueños/