Punto
Porque siempre he dicho que me gustan los puntos finales. Porque terminan todo. Porque cierran círculos. Y punto.
Porque siempre he dicho que me gustan los puntos finales. Porque terminan todo. Porque cierran círculos. Y punto.
Cada quien vive sus propios tormentos. Los míos me trajeron hasta donde estoy hoy, no sin antes intentar hundirme. La muerte me miró a los ojos una noche de febrero de 2010, recuerdo la sangre manar a borbotones de mis entrañas, me ahogaba, desaparecía. Tuve la fuerza para transformar aquel martirio. Comencé a escribi...