Mi Pecado, Mi Perdición
No debo mirarlo. No debo mirarlo con deseo. No debo desearlo así. No debo fantasear con él. No debo desear su cuerpo sobre el mío. No debo quererlo. No debo enamorarme de él. No debo enamorarme de él. No debo enamorarme de él. Esos y más son los mantras que me repito a diario para no enamorarme del esposo de mi herman...