Esta es la historia de dos amantes, dos almas enamoradas bailando al compas de las estrellas, dos muchachos de mundos completamente diferentes. Esta también es la historia de como una religión, una creencia, un culto o cualquier cosa similar puede marchitar un corazón. Y por último, es esta la historia de como una luciérnaga se perdió en el cielo, cayó a la tierra y volvió como una estrella.

Dos grandes estrellas del k-pop con un doloroso pasado en común volverán a cruzar caminos en una colaboración.

Yeonjun es hijo único, así que aprendió a hacerlo todo solo, claro, sus padres lo consentían, pero no podían darle un hermano, él había sido un milagro, así que hacía todo solo, comía solo, jugaba solo, estudiaba solo, se divertía solo, claro, tenía amigos, pero todos ellos tenían a sus hermanos, y él estaba solo. Un día, mientras miraba al cielo apoyado en el marco de su ventana, una estrella fugaz pasó, Yeonjun cerró los ojos y pidió con todo su ser tener a alguien que le hiciera compañía y estuviera solo para él... tal ves debió pedir su deseo con más tranquilidad, ahora tenía a cuatro seres de otra dimensión acompañándolo a todos lados.

Hace unos años, por eso del 1977, un gran virus, que convertía a las personas en monstruos, dándoles un aspecto de piel carbonizada, resaltando sus venas que adquirían un color rojo carmín, les salían púas en los brazos, si alguien tocaba esas púas, se contagiaba del virus, solo sus ojos eran iguales, además, todos sus sentidos estaban potenciados, la gente también decía que si te llegaban a atrapar, sus dedos parecerían agujas, y te los clavarían para hacerte igual a ellos, pero cada uno tenía una característica única, siempre acorde a su personalidad. En fin, estos seres habían salido de la nada, según muchos, pero la verdad es que fue culpa de un laboratorio clandestino en Corea del Sur, experimentaron con un grupo de chicas, una de ellas tuvo un bebé, y ese fue el primero en nacer con el virus, desde ahí, se extendió lentamente, hasta que habían nacido muchos bebés con el virus, ahí fue cuando se extendió como pólvora, y eso solo hasta que la gente se dió cuenta que solo atacaban cuando se sentían amenazados, como cualquiera, así que surgió un grupo que defendía los derechos de los sombra, así los llamaban, también ayudó demasiado que alguien se diera cuenta de que podían volver a verse como personas normales, y que podían hablar, con mucha practica, pero podían, sin embargo, la gente quería saber que los había hecho así, y bueno, la crueldad humana es tal, que vendían a sus propios hijos para que sean estudiados, ahí se descubrió que a todos los caracterizaba un gran intelecto, y bueno, con todo eso, el último caso registrado de un sombra, en Corea del Sur, fue de una niña que murió al poco tiempo, estaba muy enferma.

Lee Felix y Lee Minho eran dos cachorrillos abandonados a las puertas del gran clan guerrero del sur. El pequeño cachorrillo rubio de un año de edad era Felix y el cachorrillo castaño de tres años de edad era Minho o Lee Know, como fue llamado más tarde por los miembros del clan.

― ¿Conoces el juego del espejo? ― No. ― En esta escuela hay un espejo muy antiguo, muestra que tan débil eres. ― ¿Cómo es eso? ― Déjame mostrarte ―el mayor tomó al pequeño de la mano y lo llevó a una habitación en donde solo había un espejo viejo―. Es eso, párate ahí. ― ¿Por qué es como una estrella? ― Oh, tendrás problemas.