TERCERA PARTE Estar muerta no es agradable, lo he comprobado. El Balakän era el escondite de Axel, nuestro tablero de juego, y yo, como Reina iba a tumbar ese falso Rey. No esperaba que ese viaje que emprendía fuera a rebelarme la belleza que escondía ese mundo en el que nací. Un viaje entre razas y mundos, entre los huecos de mi alma, entre las verdades que mi corazón albergaba. No imaginé que algún día disfrutaría tanto de gobernar, y puede que uno de los motivos fuera que compartía trono con el Rey del Infierno, Damon Abygör. Y que la cama se nos quedaba pequeña para todo cuanto nos prometimos entre sábanas negras y sombras. Algo que no esperaba fue que todos tenemos promesas rotas, y con lo rotos que estábamos nosotros, no era de extrañar que alguna de ellas se quebrase. El Balakän te espera, ¿Te atreves a revelar sus secretos? Eirel Kashegarey, Reina de Save, Septuagésimo primero Guardián de Escolapio.

CUARTA PARTE Todas las leyes son injustas. Yo había defendido las leyes de mi país, lo había hechos hasta que ellas se me habían vuelto en contra. Yo no quería ser Guardián de un país colmado de monstruos, aun que para remediarlo, tuviese que convertirme en uno de ellos. El Balakän estaba en constante cambio, y al parecer, me tocaría ser uno de sus motores. El terremoto que sacudiría los privilegios de una raza por encima de las demás. Iba a salvar a Kayen de la muerte, iba a cambiar el mundo, mi raza, mis leyes, y esta vez, lo haría junto a mis hombres. Tomaría las riendas de mi vida a las bravas o a las peores. El Balakän busca valientes que se unan a esta aventura ¿Te apuntas? Eirel Kashegarey, Septuagésimo primero Guardián de Escolapio y Reina de Save.

SEGUNDA PARTE Sabía que no podía salir ilesa de todo aquello, pero no esperaba tal masacre en mi alma. Y solo fue el principio. Entre todos los pedazos rotos de mi vidriera, yo descubrí que amaba las sombras entre los brillos. Todos tenemos sombras en el alma, y me enamoré irremediablemente de las suyas. Otra guerra. Perdidas invaluables y decisiones cruciales. Todo se me iba a echar encima, por el puto aleteo de una mariposa. Y yo... Yo no iba a dejarme matar por ese maldito bicho, a Eirel Kashegarey no hay tsunami que la hunda ni rayo que la parta. Bienvenido a tu hogar de nuevo, Eralgia nos espera. ¿Vienes? Eirel Kashegarey, Septuagésimo primero Guardián de Escolapio.

PRIMERA PARTE Esto podría ser una sinopsis, pero es una promesa. Eralgia va a robarte una parte de alma, y va a regalarte una parte de la suya. Vas a conocer nuestra historia, vas a vivir nuestra vida, vas a amar nuestra tierra, y vas a reír y llorar en ella. Esta es la verdad. Considera esto una advertencia: Nadie sale ileso de este lugar. Eirel Kashegarey, Guardián de Escolapio.