Eres mía, Mia
- Déjame adivinar, crees que puedes tratarme como un juguete? - dije malhumorada - Si lo pones así, esa idea suena muy tentadora - respondió con un tono seductor, lo odio - Por qué piensas que puedes adueñarte de mi como si fuera de tu propiedad, imbecil - hable con fastidio - Simplemente porque...ERES MÍA, MÍA -.