Pedir deseos a las estrellas es para tontos || Tsukiyama
Tsukishima no pudo evitar pensar que Yamaguchi era como una estrella fugaz. Una estrella que nunca pensaste que serías capaz de ver, pero lo hiciste, porque fuiste lo suficientemente testarudo como para seguir mirando el cielo. Y si Yamaguchi era una estrella fugaz, entonces Tsukishima era el tonto que quería pedir un...