Poemas para Charlie.
Te quiero. Pero eso ya lo sabes a estas alturas.
en aquel lugar donde sólo podíamos controlar un aspecto de nuestras vidas, los zapatos hablaban más que las personas.
Cuando Brenda acogió a Aika, nunca se imaginó que esa pequeña pelirroja, de piel blanquecina, que en ese entonces tenía dos años, sería una puerta que conectaría con el inframundo dos años después. Sólo bastaba un roce de su piel para que las más sombrías pesadillas se hicieran presentes. -¿Por qué no puedes tocarme...
Al menos yo; no lo podía encontrar. No sé si te ha pasado. Supongo que sí. Supongo que sabes el golpeteo de "para qué". De "por qué". Las lágrimas vacías y los corazones sonrojados de indiferencia. Pero después de todo; lo hay.
❝No entiendo por qué te quiero, si tú odias el café.❞ Libro completo solo disponible en Amazon en formato físico y digital. Un camarero, a manera de versos, narra la historia de cómo comenzó a sentirse atraído por una de sus clientes, quien todos los días concurría a donde este trabajaba para consumir un café en silen...
ºNo se olvidará de ninguno. Ni del joven que murió y yace ahora enterrado ni de la doncella que murió también y fue enterrada con élº Walt Withman
Las palabras comenzaron a acumularse en mi garganta, impidiéndome respirar. Fue entonces cuando decidí escupir este par de versos torcidos.