El sacrificio por un pueblo... ¿Por qué tenía que ser esta pobre chica? Sus pies desnudos subían tristemente la colina. Las lágrimas de terror nublaban sus ojos de angustia. Toda ella temblaba pero era imposible pensar en escapar. Dios zorro ¿dónde estás? ...
Komorebi, son los rayos de luz del sol que se filtran a través de las hojas y las ramas de los árboles. Algo así, como esos parpadeos permanentes que acompañan el día a día. La permanencia. Lo que te ata a tierra. Algo así como su risa en el aire de invierno.
《La mayoría de personajes de esta historia le pertenecen a 𝘏𝘢𝘳𝘶𝘪𝘤𝘩𝘪 𝘍𝘶𝘳𝘶𝘥𝘢𝘵𝘦.》
❝Y entonces, las plegarias fueron escuchadas. La paz se personificó, invisible e inútil en tiempos de guerra❞. ・・・ Provenían de universos distintos, a un inmenso y profundo océano de distancia uno del otro. Las historias escritas en sus cuerpos y mentes fueron confeccionadas por realidades paralelas. Eran poseedores...
¿Sentimientos? Esa palabra no existe en el vocabulario Saiyajin. Gine es una hembra débil, jamás conoció a alguien tan extrañamente compasivo. Y la detesta... la aborrece por provocar en él esas malditas ganas de querer protegerla. Ojalá pudiera acabar de una buena vez con ella y liberarse de ese oscuro y desconocido...
