Primeros días del segundo año de Secundaria. Stu recorría los pasillos acompañado de su pandilla, bromeando y jugando entre ellos. Mientras paseaba por los corredores con el cuello de su novia atrapada en su brazo, no pudo evitar desviar su mirada a una figura algo interesante. "¿Un nuevo ingresado?" - Pensó : ¡Oigan! A este de acá no lo conocemos. - Dijo uno de sus amigos golpeando al locker al lado de donde estaba Billy. : ¿Que quieren? - Pregunto volteando hacia el grupo. Fue cuando Stu se dió cuenta de lo jodidamente atractivo que era, sus ojos, sus profundos ojos que guardaban mil y un secretos, a la vista de Stu; y esa pesadez en su mirada le parecía tan ardiente, su tono de voz, tan rígido y a la vez desinteresado. : Hey, guarda tu tono mocoso. - Le contesto otro amigo. : Hey ya déjenlo, se ve tan solo, pobrecito. - Decía su novia. : Pues si no se les ofrece nada me voy. - Dijo para cerrar su locker y salir de entre medio del grupo. : ¡Hey te estaba hablando! - Agarro bruscamente su brazo para jalarlo de nuevo. :Chicos, chicos, vamos tarde a clase, dejemos al Final Boy para después. Vamos suéltalo. - Intervino Stu, ganándose la mirada de Billy. Su amigo solo obedeció entre bufidos. El grupo se alejo lentamente, Billy volteo a ver a Stu, pensando en lo extraño y atractivo que era el chico que lo había ayudado; fue cuando Stu también lo volteo a ver, Billy pensaba darle un asentamiento en señal de gracias, pero se quedó casi helado al ver la expresión de Stu. Stu volteo su mirada a Billy una última vez, solo para sonreírle mientras se lamía el labio de forma morbosa, y sus ojos se paseaban por su cuerpo, para luego terminar en su rostro y guiñar un ojo. Billy estaba estático, solo se pudo sonrojar mientras veía como el extraño chico se iba. Sacudió su cabeza para restarle importancia e ir a su clase. Mientras que Stu solo pensaba una cosa..."Ese chico será mío"

El día que Stu decidió seguir los deseos más oscuros de su mejor amigo supo que no había vuelta atrás. Que lo quería mucho, demasiado a decir verdad. Esa noche en la penumbra de su habitación decidió por fin aceptar lo que nisiquiera ante si mismo había aceptado alguna vez. Y era que estaba enamorado de su "mejor amigo" Billy Loomis. Era el principio del fin para él. (Stu Macher x Billy Loomis)

Comparando su historia con una canción extranjera de habla hispana, Stu nos cuenta como fue ser él narrador de la canción mientras le mostraba a su "Flaca" el daño que había hecho en él durante esa época del 1996.

¿Y si Scream tiene más secretos de los que conocemos? ¿Que tal si la historia que ocurrió en aquel Halloween de 1996 tenía más transfondo del que esperábamos? ¿Conocemos realmente al asesino de ese Halloween?

[Billy loomis x mujer stu macher] En esta historia, stu es una mujer, qué es la mejor amiga de billy y su cómplice en el crimen. ¿Billy y stu tendrían éxito o morirán en el intento?

Para quién le guste la shipp Stuilly y la franquicia en general🔪✨

Donde Billy Loomis, un chico de Woodsboro algo problemático y con 18 años recién cumplidos, descubre que siente interés por cierto chico después de que Sidney Prescott, su actual ex, lo abandonase. ¿Amor? ¿Admiración? ¿O quizás sea cosa de la adolescencia? ...

♡Billy y Stu son mejores amigos desde toda la vida, Stu de por si ya sabia que Billy no estaba bien pero nadie le advirtió en lo que su mejor amigo se convertiria...♡ ☆Esta vez no hay advertencia no me critiquen cuando la lean, es bajo su propia salud mental.😊☆

Billy y Stu siempre fueron los mejores amigos, cercanos, unidos. Todo Woosboro sabía de la fuerte relación que ambos tenían, pero solo las personas cercanas a ellos sabían que ese latente interes sólo se mantenía de forma constante por el lado de Stu, mientras que Billy era inconsciente, su interés en la amistad que mantenía con Stu era poco responsable. Era un amor que ardía como un fuego lúgubre, abrazaba sólo a uno al inicio. Él lo miraba con una devoción casi obsesiva, su amor era intenso y desbordante, un amor que no conocía límites ni fronteras. Billy, era un alma libre, ajeno a esa latente obseción que su amigo sentía. Sin embargo, con el paso del tiempo, su resistencia se fue desmoronando, atrapado en la red de sus atenciones y su persistente cariño que lo carcomian como una inocente llamarada. Stu lo protegía y lo controlaba en igual medida, su amor se volvió una prisión dorada de la que Billy no sabía si quería escapar. Lentamente, él empezó a ver el mundo a través de sus ojos, sintiendo una extraña dependencia de esa intensa relación que lo consumía. La magia de su amor enfermizo lo envolvió, y lo que una vez fue un simple sentimiento unilateral se transformó en una obsesión correspondida, leal, sin límites, sin barreras o puntos finales. Billy logró a corresponder ese amor poco ético, y como una mariposa atrapada en su crisalida; que había sido diseñada para protegerla se había vuelta en su condena. #110- Gaystory- 17.09.24 #7- stuilly- 28.10.24

"Eres mío, Stu. Todo de ti me pertenece"