PRÓLOGO. Un año ha pasado desde la muerte de su hermano mayor Dylan, y lo cierto es que Jeimmy se encuentra muy lejos de alcanzar la resignación, en ocasiones incluso ha dudado de lo que sucedió esa noche en la carrera de motocicletas. Helen su madre preocupada por sus estados de animo cambiantes y el alejamiento que se ha instaurado entre ambos, planea un viaje a la cabaña del lago durante el verano, sin embargo algo sucede en la carretera, dando un giro vertiginoso a su historia, al recobrar la conciencia: su realidad a cambiado, nada tiene sentido, sus recuerdos son confusos, carentes de sentido. Esté no es su mundo, se parece al mundo que él recuerda, más no lo es; y la única persona que lo acompaña y mantiene vivo, su madre, se convierte en la artífice de su confinamiento o por lo menos eso parece al inicio. A sus catorce años Jeimmy, dudara de la veracidad de lo que esta experimentando, en determinado punto empezará a juzgar su cordura, incluso la de su madre y finalmente dudara hasta de la existencia de su entorno. Acompaña a Jeimmy y Dylan en un camino plagado de aventuras, suspenso y una pizca de fantasía, pero sobre todo en una increíble historia que nos enseña lo que estaríamos dispuestos a hacer por amor a nuestro hermano o hermana.

El desenlace de la Cuna.

-¿Qué harías si de repente, despertarás de un estado de coma en un hospital, sin saber como llegaste ahí? Pues ese es justamente el caso en el que nuestro querido protagonista se encuentra. Al volver a casa después de despertar, encuentra un pequeño cuaderno de color azul con un título claramente escrito con plumón negro, que dice "Cartas en caso de mi perdida de memoria" y su primera impresión es que seguramente compró ese libro en alguna tienda, pero mientras más lee, se da cuenta que es un diario lleno de cartas explicando cada una de las relaciones personales que tiene. O quizás solo es una manera de desahogarse de sus sentimientos del antiguo Tegami.

Es la continuación de la cuna Titulada El vuelo de las golondrinas Bienvenidos a la segunda parte de la Cuna. donde tendremos el final. Gracias por seguir aquí. Para los lectores que llegaron aquí y desconocen de la existencia de la primera parte, los invito a que se dirijan a la Cuna primera parte, para poder contar con los elementos para leer esta segunda parte y no perderse detalle de esta historia de suspenso pero sobre todo del poder del amor fraternal. Esta es una historia de suspenso, en cada capítulos dejo pistas y la historia esta llena de vuelcos y giros; sí la dividí es por la cantidad de capítulos. Me gustaría adelantarles algo pero les arruinaría el suspenso y la emoción de que ustedes descubran y encuentren las respuestas capitulo a capitulo.