Sobran las palabras
No sé como hablarte. Tengo la necesidad de conocerte. Pero me faltan las palabras, ojalá me sobraran. No es bueno mirarte, pero ya se ha convertido en rutina y de alguna forma es lo que me hace seguir adelante con el día. Te juro que me haces sentir viva, más viva de lo que jamas hubiera deseado.