Después de Dressrosa, nada vuelve a ser igual. Entre heridas, silencios y miradas que dicen más de lo que deberían, Zoro y Sanji descubren que el verdadero campo de batalla no siempre está en el mar... sino en lo que intentan negar. Un instante bastó para cambiarlo todo. Ahora, entre orgullo, tensión y sentimientos que arden en silencio, ambos tendrán que enfrentar el caos que el otro despierta.

"Los mejores médicos no pueden curarse a sí mismos. Law puede salvar corazones... pero el suyo está marchitándose en silencio." Flores empiezan a crecer en su pecho, cada una más dolorosa que la anterior. No sabe cuándo empezó ni por qué Luffy -con su risa, su cercanía, su libertad abrumadora- parece estar en cada pétalo. Él no siente. Él no se apega. Él no ama... ¿Cierto? Mientras intenta esconder su enfermedad y continuar como si nada, Law se dará cuenta de que hay cosas que ni la cirugía puede extirpar: lo no dicho, lo no querido admitir, lo que florece en silencio. ¿Cuánto puedes callar antes de empezar a morir por dentro?