Jeon Jungkook siempre supo que su destino era convertirse en el alfa más poderoso de la familia Jeon, sin importar el precio. Frío, calculador y dispuesto a todo para proteger su compañía, nunca imaginó que un error del pasado volvería a atormentarlo. Cuando descubre que tiene un hijo-un cachorro abandonado y rechazado por su propio linaje-Jungkook se niega a aceptarlo. La sola idea de criarlo lo llena de ira, sobre todo cuando se entera de que su madre fue su peor enemiga. Sin embargo, para no perderlo todo, se ve obligado a llevarlo a casa, aunque cada mirada del niño le recuerde un pasado que preferiría olvidar. Mientras lucha con su rechazo hacia Yeonjun, otro sentimiento amenaza con desestabilizarlo aún más. Un Omega que llega en medio de su peor caos, , despiertando emociones que Jungkook se niega a aceptar. Su lobo lo reclama con una intensidad desconocida, pero su parte humana se niega a ceder. ¿Cómo podría permitir que alguien como él, destinado a la soledad y el poder, encontrara refugio en alguien más? Entre el odio, la negación y la inevitable atracción, Jungkook se verá atrapado entre dos fuerzas que podrían cambiar su destino: su hijo y su destinado. ¿Será capaz de aceptar a Yeonjun como su heredero y protegerlo del mundo cruel en el que nació? ¿Podrá admitir que el amor no es una debilidad, sino su mayor fortaleza? En un mundo donde la fuerza lo es todo, Jungkook descubrirá que el verdadero poder no reside solo en la sangre, sino en aquellos dispuestos a amar incluso a la bestia más oscura.

Pensé que al ser adoptada, al fin tendría una familia. Un hogar. Un hermano. Pero en este mundo, nada es lo que parece. Fui vendida como parte de un trato entre mafiosos. Y quien debía protegerme... fue quien me traicionó. Él, mi hermano adoptivo, siempre me miró de una forma distinta. No como una hermana, sino como algo que podía poseer. Cree que el dinero lo compra todo: mi cuerpo, mi silencio, incluso mi amor. -"Pon los ceros que quieras en ese cheque" -me dijo con arrogancia. Pero yo no estoy en venta. Esta es la segunda parte de Vendida a un mafioso, una historia donde la sangre no define los lazos... y donde el amor, a veces, puede ser la forma más peligrosa de prisión.