agusswrites
1913.
Charles Forbes había hecho innumerables esfuerzos para captar la atención de alguno de los hijos de Jacob Pierce hacia su única hija.
Finalmente, tras años de juegos infantiles, reuniones casuales y cenas amistosas, lo había logrado: Claudia Forbes estaba comprometida con el segundo hijo de Jacob Pierce.
Pronto, los intrincados lazos familiares, las políticas y los secretos de los Pierce se convertirían en la ruina de Claudia. Siempre curiosa, siempre llena de vida.
¿Su deseo de pertenecer lograría impulsarla a involucrarse en el vil negocio familiar?