Adiós mi México.
- Perdimos... - susurró con horror un hombre de cabellos castaños y piel morena, él era nada más y nada menos que la representación de México, quien, con manchas de sangre tanto suya como de sus enemigos, miraba cómo su presidente perecía en manos del extranjero. Él, junto con su gente habían luchado hasta el cansanci...