La vida para Mark Grant siempre fue dura gracias a su rota relación con su padre y la ausencia de su madre, sin embargo las cosas estaban por ponerse todavía peor. De la noche a la mañana, Mark terminó en un hospital bastante extraño, rodeado de químicos, fármacos y muchas cámaras de seguridad. Un lugar donde experimentaban con personas y los mutaban, dándoles habilidades que solo se imaginarán en cuentos de fantasía o en historietas cómicas. Dentro de su celda conocerá a quienes serán sus amigos y, en un futuro no muy lejano, sus mayores aliados además de su familia. La vida les pondrá muchos obstáculos que vencer y un objetivo que cumplir: evitar que el mundo tal y como se conoce deje de existir. ¿Podrán detener la amenaza inminente que se les presentará? ¿Obtendrán justicia por lo que sufrieron? Su objetivo es claro, tienen que salvar el mundo y detener a aquellos que tratan de destruirlo.