Melina Hadworf es quizás la persona más descorazonada que existe, la que cree que nadie más que sus amigos merecen su completa entrega y lo ha cumplido. Su corazón, no es capaz de amar a nadie más y tampoco sabe cómo contener el odio que desborda por el hombre que una vez acabó con sus ilusiones. Con el alma envenenada y el resentimiento a punto de hacerle explotar luchará por encontrar la justicia que necesita y destruir al hombre que tanto quiso aún si eso significa acabar con la poca humanidad que le queda y dejar pasar al amor sin abrirle la puerta.

Parker Walsh Welshmen ha escondido su identidad por diez años cultivando misterio y escepticismo a su alrededor, con el apodo del ángel y con una camaleónica personalidad, solo un puñado sabe en realidad su origen y su verdadero rostro. Con un amor que proteger, con ansias de venganza por todo lo arrebatado y con la ira desatada, el ángel se convierte en el ser más despreciable y oscuro amenazando arrastrar al infierno todo, incluyendo su propia felicidad.

Maximilian Archibald, el monstruo como lo llaman sus conocidos, no es más que un hombre implacable escondido bajo una personalidad tonta y absurda; regenteador de uno de los casinos más famosos y experto en finanzas lleva años buscando una oportunidad para encontrar a la mujer que una vez destrozó su vida. Ansioso por demostrar por qué se ha ganado el apodo a pulso esperará paciente el arribo de su oportunidad para enfrentar sus más grandes miedos y más aún, dejar atrás la amargura que le acecha desde hace más de diez años a riesgo de encontrarse con la mujer que pueda arrebatar el pedazo de corazón que aún le queda. Solo una mujer con la suficiente bondad y pasión logrará seducir al monstruo y arrebatarle el corazón.