Candela Asensio, hermana del joven famoso futbolista Del Real Madrid. Vuelve a reencontrarse con muchos compañeros del equipo de su hermano, unos que ya conocía y otros con los que o no se llevaba mucho o con otros nuevos, y también con ESE compañero llamado Karim Benzema y mantienen una "relación" que al principio era amor odio Y lo dejaron un tiempo largo por el comportamiento de este, cuando a Asensio lo llaman para la selección junto a la hermana por su trabajo de psicología, Candela se reencuentra con su ex pareja.... No se llevaban mal ya que puede que pase algo más. Que pasará?....

Mi nombre es Marta García, tengo 24 años y resido en Madrid. Actualmente vivo con mis padres, pues encontrar piso es un autentico caos. Estoy estudiando Magisterio en la universidad y en los ratos libres suelo leer o ver videos de mis youtubers favoritos, que no son muchos y pasar el fin de semana con mi mejor amigo, Pablo López aunque a pesar de que él es cantante siempre solemos vernos. Mi madre cree que algún día será mi novio, pero yo lo veo como un hermano. Lo único que nos diferencia es la edad pero bien cierto es que el amor no entiende de edades.

Esta es la historia de Pablo y Daniella. Pablo nació en Málaga, el 11 de Marzo de 1984. Vivió y creció en Fuengirola, junto a su madre Lola, su hermano Luis y sus abuelos maternos. Desde muy pequeño descubrió su amor por la música, especialmente por el piano. Su madre le inscribió en el conservatorio, donde pasaba las tardes. Daniella es de Madrid. Allí nació el 13 de Enero de 1988. Su sueño desde que tuvo uso de razón fue escribir. Por ello decidió estudiar periodismo, con el objetivo de poder dedicarse a narrar historias. Las vidas de ambos se cruzaron el verano de 2007, en Mijas. Trabajaban en el mismo hotel. Lo suyo fue una conexión especial, a primera vista. Los años pasaban, la vida daba multitud de vueltas. Pablo triunfaba y caía. Y volvía a triunfar. Daniella vivía libre, alborotada y loca. Y jamás pudieron dejar atrás lo que en aquel momento surgió... De algún modo siempre volvían a encontrarse. Y en verdad quién dijo que dónde hubo fuego siempre quedan cenizas debió vivir una historia parecida a la de ellos...