Heisy pensaba que aquel viaje sería como cualquier otro: nuevas personas, recuerdos fugaces y un atardecer más para guardar en su memoria. Pero no contaba con que en medio de la brisa marina y las sombras que se alargan con el sol, encontraría a Daniel... un chico tan enigmático como imposible de ignorar. Él parecía esconder algo detrás de su mirada intensa, algo que lo mantenía distante, como si la oscuridad lo reclamara constantemente. Entre enojos, encuentros inesperados y silencios que hablan más que las palabras, nació una conexión que ninguno de los dos pudo evitar. Pero Daniel guarda un secreto: la luna lo llama, la bestia lo domina. Y aunque el amor lo acerque a Heisy, el destino podría separarlos. Entre el misterio, la pasión y el peligro, nace una promesa bajo el atardecer... una promesa capaz de cambiarlo todo.